La creatividad, esa cualidad especial que mejora todo lo que toca. Algunas personas se declaran enamorados de ella e intentan impregnar todo lo que hacen con ese toque diferente, sin embargo, otras dicen no ser creativas y creen no hacer uso de ella. Pero, ¿qué es realmente la creatividad?. Según la RAE es la “facultad de crear” o “capacidad de creación”. Esta definición la aleja mucho de ser una profesión en particular, eso si, cuanto más presente se encuentra en el trabajo, más brillante puede ser el resultado. En algunos campos se ha vuelto completamente indispensable, siendo el factor clave para diferenciarse del resto, desde la publicidad, pasando por la cocina, la música, y en general, cualquier aspecto cotidiano.
La naturaleza de la creatividad es crear cosas únicas y originales que no han sido creadas antes o que a partir de algo existente, aportan una innovación que le da una segunda oportunidad a algo que ya estaba consumado. En la actualidad, que prácticamente está todo inventado, el saber darle un giro a las cosas, es algo muy valioso.
Dentro del mundo de la creatividad existen diferentes opiniones sobre ella. La creatividad, ¿nace o se hace? ¿surge de manera espontánea o se puede utilizar metódicamente? Realmente no existe una verdad única, ya que hay personas que nacen con una capacidad fuera de serie para crear o realizar su trabajo de una forma más creativa, pero también es cierto que hay varias formas de fomentarla. Suele surgir de una inspiración momentánea, pero hay métodos que nos pueden ayudar a provocar ese momento y lo que es más importante, evitar los lapsus y el quedarse en blanco.
La creatividad que se necesita hoy en día es la de hacer cosas para que la gente las quiera, ya que todo se puede convertir en un producto atractivo mediante la ambición creativa. El valor del producto ya no es suficiente, hay que crear un valor añadido y extraer todas las facetas que puede aportar un mismo producto, enriqueciendo el existente, por ejemplo Nike, que comenzó como marca de zapatillas de deporte, ahora es el nombre de todo tipo de complementos.
Realmente la creatividad es una habilidad intangible, no podemos tocarla, y por mucho esfuerzo que se deposite en incrementarla o impulsarla, habrá veces en las que nos abandone por completo, pero lo que está claro es que cuanto más la trabajemos, menos nos abandonará.
Siempre puedes hacer algunas cosas, como llevar una libreta encima en la que apuntar las ideas que se te vayan ocurriendo, incluso dibujarlas, hacer listas, escuchar música que no conocías, probar a escribir o dibujar algo, etc., etc. Pero la creatividad se basa sobre todo en la actitud de cada uno, tienes que ser una persona curiosa, con ganas de impregnarte de todo lo que veas y toques, de todo lo que te guste o te haga sentir. Cuantas más cosas sepas, más fácil te será relacionar conceptos, cuantas más cosas nuevas veas, más ideas nuevas te surgirán. Debes salir de la pantalla del ordenador, ir a lugares que no conoces, tocar un instrumento, abrir la mente, cantar en la ducha, cualquier cosa que se te ocurra vale para conocer y descubrir nuevas inspiraciones que se conviertan en ideas.
Pero, que la creatividad surja de manera espontánea no significa que no conlleve trabajo. Debes practicar mil veces lo que quieras hacer y permitirte tener errores, aun más, aprender de ellos. Valora tu propio trabajo, porque si tú no lo haces, no lo hará nadie. Para ser creativo debes asumir riesgos, romper las reglas, darle la vuelta a las cosas. Si te rodeas de gente creativa y colaboras para conseguir un buen trabajo en grupo, podrás mirar las cosas desde más puntos, y es una gran ventaja.
Seguro que después de leer este post, has descubierto un montón de cosas nuevas qué hacer y otras que se te habrán ocurrido a ti. Lo importante es divertirte haciéndolas, porque si te gusta lo que haces, lo demás llegará solo. Y recuerda que cuanto más creativo seas, mucho mejor…