Como sabemos, la marca España, desde hace varios años se encuentra en declive, debido a una crisis que ha ido desmoronando el valor de marca “made in Spain”.
Esta última semana, esa negatividad hacia el país, se convierte en un halo de esperanza. La autoestima y la energía positiva crecen desmesuradamente debido a un maravilloso acontecimiento «La Roja» completa el ciclo más exitoso de la historia de las selecciones, con su tercer título en seis años.
Aunque para algunos sea irrelevante a nivel de crisis, la internacional de fútbol es un poderosísimo impulsador de marca fuera del país, y por eso creemos que esta victoria ayudará a regenerar un poco la imagen de España, identificándola ya no con sus fracasos económicos, sino con el triunfo y la unión que se respira tras la victoria.
A día de hoy, los españoles afrontamos la situación con otra actitud más optimista y descansada, gracias a la victoria en la Eurocopa, que como catalogan algunos “es más que fútbol”.
Pues ¡los imposibles existen! y la marca España se ha revalorizado, consiguiendo un aumento en el consumo de sus productos, en popularidad y como no, en el prestigio que se merece.
No sólo ha conllevado la publicidad del país, sino de muchas marcas patrocinadoras ya habituales en los triunfos de “La Roja”, como Cruzcampo, Movistar, Coca-cola o Hyundai, entre otros…
Nuestro jugadores han dado una gran lección de unidad, de trabajo en equipo, de esfuerzo compartido, de cooperación para conseguir un objetivo común, y eso es lo más importante en este momento para la situación en la que estamos inmersos, formar un buen equipo para salir de esta crisis. Más allá de los intereses comunes, en este momento necesitamos un interés de grupo, de país.