Para los que no están familiarizados con esta terminología, un Jingle es una pieza musical corta que consta principalmente de un slogan y/o de una melodía. Es decir, los Jingles son mensajes publicitarios musicales con una melodía sencilla, de corta duración (de 5 a 60 segundos) y de fácil de recuerdo por todos.
Destaca por ser un mensaje corto, básico, repetitivo y efectivo; muy sencillo para asociarlo a la marca que representa, y sus características principales son: Recuerdo, Impacto, Popularidad y Duración en el tiempo. Al ser composiciones musicales, son más persuasivas que un simple texto y generan un menor rechazo en la audiencia que lo recibe. Aunque hoy en día esta técnica cada vez se utiliza menos, hay algunos que aunque pasen los años, seguiremos cantando.
Muchos anuncios publicitarios, especialmente los efectuados en radio y televisión, cuentan con este elemento que ayuda a crear campañas únicas que se quedan grabadas en la mente de quien las escucha, mejorando el posicionamiento de la marca en el mercado. A esta estrategia se le conoce como branding auditivo. Sus cualidades lo convierten en un mensaje efectivo y por lo tanto muy exitoso.
El éxito del impacto de la música de los anuncios publicitarios se genera y reside en nuestro cerebro. En este sentido, nuevas investigaciones en el campo de la Neurociencia y el Neuromarketing han descubierto algunos aspectos del comportamiento y funcionamiento del propio cerebro, que podrían ayudar a seleccionar aquellas canciones o melodías que pudieran generar mayor impacto en los consumidores. Esta exitosa relación entre la música y la publicidad, llevó a la Universidad de Emory (Atlanta) a realizar una investigación, donde se concluyó que los patrones de actividad cerebral pueden ser capaces de predecir la popularidad de la música.
A continuación os mostramos los tipos de Jingles que podemos encontrar y algunos ejemplos:
- Jingle-canción: Esta es la opción más compleja pero a la vez la que ofrece más juego y más recuerdo, ya que podemos incluir descripción del producto, slogan, marca, realizar nexos con nuestros público objetivo, etc. En realidad las posibilidades son infinitas y el resultado dependerá de los objetivos y de la creatividad de los creadores del Jingle. Como ejemplo, os presentamos algunos de los Jingles más exitosos del siglo XX, seguro que os suenan…
Famosa
Cola-Cao
Conguitos
- Jingle-slogan: Ideal para cuando queramos recalcar, cambiar o mejorar el posicionamiento de nuestra marca, es decir, la manera que tienen de vernos los consumidores. Un buen ejemplo de ello son los anuncios de McDonald’s y su «I’m loving it» o el clásico de Nocilla.
McDonald’s
Nocilla
- Jingle-marca: Esta opción es perfecta para conseguir una posición privilegiada de nuestra marca en la mente del consumidor, es decir, para convertirnos en una marca de referencia y estar entre las 3 primeras marcas que nos vienen a la cabeza. La marca 11811 es un buen ejemplo de ello.
Telefónica – 11811
- Jingle-melodía: Únicamente se la pueden permitir aquellas marcas cuya melodía ya está muy instaurada en la mente del consumidor y que tan solo con escucharla, automáticamente somos capaces de reconocer la marca. Un ejemplo muy actual serían los anuncios de McDonald’s, que después de avasallarnos con su cambio de imagen a más «sana, moderna y actual», ya cierra sus anuncios con el logo de McDonald’s a fondo verde y la melodía de «I’m loving it«, pero sin la letra, ¿no os habíais dado cuenta? Si es así, es que ya tenéis completamente interiorizado el slogan de McDonald’s.
McDonald’s
Y después de ver estos ejemplos, ¿qué tipo de Jingle es el que más recuerdas tú?
Fuente: www.puromarketing.com