Usar la imagen de influencers y celebrities para promocionar un producto o servicio través de las redes sociales es una estrategia muy utilizada por las marcas. Sin embargo, ya se empieza a entender que más que la cantidad de seguidores que tenga un influencer, lo que importa es la calidad de los mismos. Como dice el refrán: “Menos es más”. Por eso, los microinfluencers comienzan a ser cada vez más buscados. Hoy os contamos por qué trabajar con los microinfluencers y cómo elegirlos.
Lo primero que debemos saber es que los microinfluencers son pequeños líderes de
opinión, expertos en un tema concreto. A diferencia de los grandes influencers o
celebrities, tienen una comunidad con menos seguidores –normalmente entre 1.000 y 50.000-, pero con mucho más engagement.
Evidentemente elegir unos u otros dependerá del objetivo, el presupuesto y el tipo de
producto o servicio que se quiera lanzar o promocionar. Sin embargo, las campañas
con microinfluencers son bastante efectivas para aquellas marcas que desean
enfocarse en un sector específico.
¿Por qué trabajar con los microinfluencers?
Una de las ventajas es que se necesita poca inversión. Cuantos más seguidores tenga un influencer, más dinero cuesta contratarle. Y viceversa.
Por otra parte, los microinfluencers son naturales y auténticos y tienen mucha credibilidad entre sus seguidores. Además, suelen tener una comunidad sólida y muy activa. En consecuencia, el ratio de engagement es mayor.
Hay que tener en cuenta también que los millenials toman decisiones a tiempo real y se basan en las recomendaciones de los influencers que siguen. Eso supone una ventaja para las marcas si son capaces de crear alianzas con las personas correctas.
¿Cómo elegir los microinfluencers?
Ahora, para saber a cuál o cuáles elegir se recomiendan varias cosas:
- Lo primero: tener muy claro cuál es el público objetivo. Como hemos dicho antes, los microinfluencers son expertos en un tema específico y, por tanto, saber segmentar la campaña correctamente es indispensable.
- Analizar quiénes tienen más afinidad con la marca. Es importante que empaticen con la personalidad y los valores del producto o servicio para que la campaña sea coherente y creíble.
- Informarse sobre qué otros trabajos han hecho y con qué marcas. Esto servirá para inspirarse y, más aún, para saber cómo diferenciarse de posibles competidores.
- Elegir una persona que trabaje de forma profesional y en la que se pueda confiar.
Los microinfluencers son los que mejor conocen su audiencia y, lógicamente, quienes saben cómo hacer llegar de la mejor forma el mensaje. Por tanto, son ellos quienes deben encargarse de formular el mensaje.