La creatividad aplicada a la búsqueda de empleo
La creatividad es la capacidad de transmitir información y conocimientos y de encontrar soluciones de una forma nueva, original o divergente, por lo que una persona creativa puede ser desde un artista o un profesor, hasta un diseñador o vendedor.
La creatividad puede ser utilizada como una herramienta con un valor añadido muy importante ya sea para definir un método de trabajo o exponer un objetivo profesional, como también crear un currículum vitae o cualquier carta de presentación, donde puede reflejarse perfectamente la imaginación, la originalidad, las ideas y el ingenio que una persona puede ofrecer profesionalmente, destacar y… ¡Llegar a ser la elegida o elegido en el puesto de trabajo!

Actualmente, las empresas valoran mucho más una mente pensante, curiosa, activa y una personalidad creativa y resolutiva. Por lo que el objetivo es, de alguna manera, a través de nuestro CV, poder sobresalir entre los demás currículums ya que, por el momento, es la primera y única herramienta que tienen para saber un poco más sobre nosotros.

Estos son diferentes ejemplos, pero cabe recalcar que hay infinitas posibilidades y que lo importante es que se transmitan las cualidades propias que nos definen y nos diferencian de otros.

Crear es producir novedades eficaces desarrollando el pensamiento productivo: “pensar lo que todavía nadie ha pensado sobre aquello que todos están viendo”.

Por supuesto, hay gente que tiene esta capacidad innata pero también es posible desarrollar la creatividad a partir de las cuatro etapas del proceso creador: preparación, incubación, iluminación y verificación a través de diferentes técnicas para desenvolver dicha capacidad creativa, como el “brainstorming”, “provocative operation”, las analogías o los ideogramas.
Se trata de llegar al “elemento”. El elemento se resume en un conjunto de motivaciones profesionales y emociones personales que se representan de la siguiente manera:

Para conseguir esto, una de las características más importantes es el impacto emocional.
Las personas actualmente somos mucho más visuales que antes y buscamos esa parte motivacional y emotiva en las acciones, que representa el primer círculo (el más importante) formado por “la pasión y la misión”.
Por ejemplo, si tu misión es la enseñanza y tu pasión son los niños, enfócate en ambos objetivos y trata de crear una presentación que refleje estos dos conceptos de manera clara, sencilla, diferente y, lo más importante, visual.
Incuso con video o, ¿Por qué no? Añadiendo un pen drive con tus proyectos.
Estos ejemplos son realmente sencillos. Pero cuentan con la base principal de la creatividad: la unión de dos conceptos que, en principio, no tienen nada que ver entre sí y la solución efectiva a través de la imaginación de una nueva forma.

Hay infinitas posibilidades color, textura, belleza, diseño, y demás, de llegar al elemento, pero este solamente es posible cuando se hace de manera sorprendente lo que es evidente.
Espero que os inspire y, ¡a darle rienda suelta a la imaginación!