Cómo hacer un buen storyscaping
En nuestra anterior entrada os explicamos en qué consistía el storycaping, sus semejanzas y diferencias con la estrategia del storytelling y su aportación al marketing digital. En esta os vamos a contar cómo hacer un buen storyscaping y para ello vamos a exponer una de las estrategias más utilizadas en el storyscaping por sus resultados junto con los elementos que se han de tener en cuenta antes de empezar a hacer el storyscaping.

Elementos necesarios para hacer un buen storyscaping
La clave para hacer un buen storyscaping es empezar por la base al igual que cuando se quiere construir algo, lo más común, y lo más importante, es empezar por las bases que van a sostener la estructura. Para poder empezar a construir la base, hay que tener en cuenta una serie de elementos que definen el storyscaping. El primero de ellos es tener en cuenta que, para hacer un buen storyscaping, este debe desarrollarse y adaptarse a cualquier entorno u plataforma en la que el cliente interactúe con la marca.
Otro de los elementos que hay que comprender es que la marca adopta el rol de guía, alejándose de la concepción de la marca como el héroe de la historia, como es en el caso del storytelling.
Siguiendo con el anterior elemento, si la marca es el guía, ¿a quién dirige? Obviamente, al protagonista, al héroe de la historia, sin embargo, ¿quién es ese héroe? En el storyscaping, ese héroe es la audiencia, es el cliente. Un buen storyscaping narra la historia del consumidor y su relación con la marca, el cliente es el protagonista.
Un último elemento y estrategia muy utilizado no sólo en marketing sino también en series de televisión y películas, la de dar continuidad, no seguir la normativa de la narrativa tradicional de principio, argumento y final, sino concebir un universo en el que se cuentan varias historias sobre como el cliente y la marca interactúan, historias que se encuentran conectadas entre sí y permiten la prolongación de la historia entre ambos.

Imagen de Imagewërks
La idea organizadora
Una de las estrategias más comunes para empezar a hacer un buen storyscaping es la de la idea organizadora. Esta consiste en definir en primera instancia qué debe hacer la marca para modificar el comportamiento de los clientes, cómo inspirar la creación del tipo de experiencias necesaria para que un storyscape bueno.
Esta estrategia ha de contar con una serie de características para que pueda cumplirse con los objetivos propuestos con el storyscaping.