Los Juegos Olímpicos de Londres 2012, son los juegos de las grandes marcas; de Twitter y de los «whatsapp«. Al ser los primeros Juegos en los que el social media va a tener un papel protagonista, los expertos ya las llaman “Socialympics”.
53 marcas patrocinadoras, desde Coca Cola a McDonald’s, pasando por Adidas, Samsung, Visa y Omega. Según algunas agencias de publicidad, las restricciones en marketing y publicidad son las más duras que se hayan visto jamás para un evento. Encontramos algunas limitaciones que muy poco tienen que ver con el “Olympic Sprit”. Los organizadores han llegado a un acuerdo con Twitter, para que esta red evite a las marcas no patrocinadoras usar hashtags como #London2012, por ejemplo. Las personas asistentes a los Juegos Olímpicos de Londres no podrán llevar artículos que pudan competir con los patrocinadores del evento. Tampoco se podrá entrar comida o bebida al recinto, para saciar el hambre habrá que recurrir a la comida de McDonald’s, acompañada de una Coca Cola.
Las Olimpiadas deberían ser los juegos más ambientalistas y sostenibles de todo los tiempos, no obstante, al echar un vistazo a la lista de sus patrocinadores, entre ellos figuran la famosa petrolera Bp o la Dow Chemical, una empresa química, que causó una de las mas graves catástrofes industriales del mundo en la ciudad de Bopal en 1984.
Puede que los Juegos Olímpicos hayan perdido todo el valor sentimental de los “antiguos». Para organizar un espectáculo digno, sabemos que algunas veces, debemos hacer un «pacto con el diablo«, ya que después del 12 de agosto todos nos acordaremos sólo de las medallas ganadas y del fantástico espectáculo del deporte.