¿Sabías que el mayor número de compras que realizamos a lo largo de nuestra vida está motivado por estímulos irracionales? Los colores tienen mucho que decir sobre esta toma de decisiones.
Muchas reacciones de las que provocan los colores vienen asociadas a un lugar y una cultura, por eso un mismo color puede afectar de forma distinta y significar algo muy diferente en diversas personas.
Según un estudio realizado por Kissmetrics, a la hora de realizar una compra, los consumidores se sienten más atraídos por la apariencia visual en un 93%, frente a un 6% que se fija en la textura y un 1% en el olor. Además, el 85% de los compradores afirma que el color del producto es la razón principal por la que deciden adquirirlo. Por otro lado, hay que tener en cuenta que el color puede ayudar a identificar una marca. De hecho, el color aumenta este reconocimiento de la marca en un 80%, algo que se relaciona directamente con la confianza de los clientes hacia la marca.
Pero, ¿Qué ocurre con aquellas empresas que optan por el blanco y negro para sus campañas publicitarias? Si bien el color se utiliza para representar la alegría, la energía y lo joven, el blanco y negro aboga por representar el lujo, la calidad, la sofisticación y la elegancia en sí misma. De igual forma, este tipo de publicidad nos permite resaltar nuestro producto sobre el resto de las campañas, como es el caso del anuncio de Dolce & Gabbana; en una fotografía cargada de elegancia y sencillez se resalta el producto de la compañía, el cual se encuentra a color, sin llegar a restarle protagonismo al fondo de la imagen, pero llamando la atención lo suficiente como para no pasar desapercibido.
Los anuncios donde el blanco y negro se vuelve protagonista pueden parecer una apuesta arriesgada, ya que para algunos es la viva representación de la mala suerte o incluso la muerte. Pero lo cierto es que a nivel estratégico, optar por esta opción, puede ser determinante para triunfar y destacar ante el resto. Y es que puede que una de las claves para triunfar en la publicidad, en un mundo donde nos regimos por estímulos, no sea otra que quitarle un poco de color a nuestra vida.
¿Y tú, cómo prefieres ver la vida, en blanco y negro o a color?